miércoles, 29 de octubre de 2014

NUEVA ISO 45001

Quizás no hayas oído hablar de esta ISO 45001 pero esta norma va a sustituir a otra que seguro has oído hablar: la OHSAS 18001.
La ISO 45001 por tanto va a establecer los criterios para un Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo
En octubre de 2013, la Organización Internacional de Normalización (ISO) decidió seguir adelante con el desarrollo de esta norma ISO que reemplazara a OHSAS 18001 en los próximos tres años.

El calendario previsto es:

Suponiendo que estos plazos sean exactos, la norma se llamará ISO 45001: 2016, de acuerdo con la nomenclatura habitual de las normas publicadas por ISO.
El borrador de la futura ISO 45001 recoge la mayoría de los requisitos de OHSAS 18001 y, además, la futura Norma pondrá más énfasis en el contexto de la organización y reforzará el papel de la alta dirección en el liderazgo del Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo. 
La palabra OHSAS es un anagrama en inglés que significa Ocupational Health and Safety Management Systems o Sistemas de Gestión de Salud y Seguridad Ocupacional en español.
El origen del OHSAS 18001 es más reciente que ISO 9001 e ISO 14001. Es una norma que fue creada en 1999 en Reino Unido pero que actualmente tiene reconocimiento  tanto a nivel nacional como internacional. 
Esta norma puede aplicarse a todo tipo de organización sin discriminarlas por su tipo, tamaño o por su ubicación geográfica y puede adaptarse a cualquier entorno legal, social y cultural. 
La transformación a norma ISO se produce debido a la cada vez más cantidad de certificados que hay con esta norma, por lo que se necesita establecer una nueva norma internacional.
La última actualización de la OHSAS 18001 se produjo en el año 2007 para adaptarse a la evolución de los distintos sistemas y los distintos cambios tecnológicos suponiendo como principal beneficio el acercamiento a los requerimientos estructurales de las normas ISO 9001 e ISO 14001 permitiendo su extensión y el desarrollo de los primeros Sistemas Integrados de Gestión.
Las empresas que poseen la certificación de la OHSAS 18001 se le des dará un tiempo para que se puedan ajustar a la nueva ISO 45001.
El estándar ISO 45001 por tanto facilitará una mayor compatibilidad con otros sistemas de gestión y tendrá, seguramente, un mayor reconocimiento a nivel internacional.
La norma ISO 45001 se prevé que utilice la misma estructura común, las definiciones y el texto básico que se utiliza para las actuales revisiones de ISO 14001 e ISO 9001. Es por ello que la estructura estará basada en el "Anexo SL" cuyo esquema, como hemos comentado en otros artículos del blog, es:
1. Alcance
2. Referencias normativas
3. Términos y definiciones
4. Contexto de la organización
5. Liderazgo
6. Planificación
7. Apoyo
8. Operación
9. Evaluación del desempeño
10. Mejora

Dicha norma se aplicarán en las organizaciones que estén buscando:
  • Establecer un sistema de gestión de SST para eliminar o minimizar el riesgo de sus empleados y otras partes interesadas que puedan estar expuestas a ellos
  • Mejorar su desempeño en lo que se refiere en materia de salud y seguridad.
  • Integrar la actividad preventiva en el sistema general de gestión.
  • Trabajar bajo unas condiciones ajustadas a las políticas de seguridad y salud que impone la norma internacionalmente.
  • Implantar, mantener al día y mejorar continuamente un Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud que este reconocido tanto a nivel nacional como internacional.
  • Demostrar a terceros la conformidad en materia de Seguridad y salud mediante la certificación de su sistema.

Según se vayan produciendo las siguientes etapas de revisión pueden surgir cambios antes de la publicación final prevista para 2016. Os tendremos al tanto de cualquier cambio que se produzca.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Principios de Imparcialidad y Objetividad en los procesos de Certificación.

Una Auditoría es un proceso sistemático, independiente y documentado para obtener evidencias y evaluarlas de manera objetiva con el fin de determinar el grado en que se cumplen los criterios de auditoría.



La realización de una auditoría debe asegurar dos principios fundamentales: la objetividad e imparcialidad del proceso de auditoría.

El concepto de imparcialidad es el que la relaciona con una toma de decisiones o juicio sin subjetivismos, es decir permaneciendo neutral o sin tomar partido. La imparcialidad es sinónimo de presencia real y percibida de objetividad.

La objetividad es la ausencia de conflictos de intereses o que si estos existen, estén resueltos sin que afecten de forma adversa a las actividades de cualquier certificadora.

La actividad de certificación consiste, precisamente, en realizar una evaluación imparcial y competente de tercera parte, garantizando confianza a todas las partes interesadas de que el sistema de gestión cumple con todos los requisitos aplicables especificados.

La imparcialidad será el principio básico que contribuya a generar confianza en el cliente y el negocio.

La propia norma ISO 17021 reconoce que la principal fuente de falta de imparcialidad corresponde al mercado en el que se mueven los organismos de certificación, ya que sus ingresos provienen de sus clientes y, al fin y al cabo, ellos pagan por la obtención de un certificado.

La solución a este tipo de conflictos radica en que las decisiones que adopte el organismo de certificación se basen exclusivamente en la evidencia objetiva de conformidad o de no conformidad que se obtenga de las auditorías, ya que, así, se garantiza que estas decisiones no estén influenciadas por otros intereses.

Los conceptos de imparcialidad e independencia relativos a las actuaciones de un auditor están íntimamente relacionados. Se entiende independencia como “la capacidad de adoptar decisiones propias, actuando sobre la base de procesos de pensamiento y criterio también propios, sin recibir influencias externas”.

Tanto la imparcialidad como la independencia de los auditores, son determinantes a la hora de valorar la calidad de las auditorías de certificación, conformándose la independencia como un aspecto intrínseco a las auditorías entre cuyos objetivos está el de mejorar la confianza y aumentar la credibilidad. La independencia del auditor aporta y garantiza confianza en el proceso de certificación.

La calidad de las auditorías realizadas por los auditores de certificación también puede verse determinada por muchos otros factores condicionantes.

El auditor no puede participar en auditorías de certificación en un cliente para el que haya ejercido labores de consultoría en un periodo definido de tiempo, normalmente estimado en 2 años.

La gestión de la imparcialidad ha sido una cuestión muy discutida en el ámbito de las Entidades de Acreditación durante los últimos años, para lo cual se establecieron normas para evitar conflictos de intereses en los Organismos de Certificación.

El punto más conflictivo fue el relativo a la consultoría de implantación de sistemas de gestión, por lo que algunas certificadoras han optado por dejar esta actividad y dedicarse exclusivamente a la evaluación de la conformidad, no realizando consultoría, asesoría o soluciones a las desviaciones identificadas en su actividad de certificación.


Fuente consultada: Ó Bureau Veritas Formación, S.A.

miércoles, 1 de octubre de 2014

Gestión de Residuos Peligrosos

Los residuos peligrosos que se generan como consecuencia de las actividades de una Organización deben ser gestionados por un gestor autorizado.

Son residuos peligrosos aquéllos que reciban tal clasificación (aparecen con un * al lado del código) en la Lista Europea de Residuos y la normativa específica de residuos peligrosos (RD 833/1988 y RD 952/1997).

Estos residuos no pueden permanecer almacenados en las instalaciones de la Organización más de 6 meses y durante este periodo deben estar correctamente envasados e identificados. 

La gestión de los residuos peligrosos se documenta a través de los siguientes documentos:

Comunicación Previa 
Si somos productores de residuos peligrosos debemos de realizar una “Comunicación Previa al Inicio de las Actividades (instalación, ampliación, modificación sustancial o traslado)” ante el órgano ambiental competente de la Comunidad Autónoma donde estén ubicadas las instalaciones. Mediante este formato se indica a la Autoridad Competente que residuos peligrosos vamos a producir. 
Una vez la Comunidad Autónoma reciba dicho registro y este conforme otorgará a la Organización un Número de Identificación Medioambiental (NIMA).

Autorizaciones de Gestor y transportista de residuos peligrosos
El Gestor seleccionado debe estar autorizado por la Autoridad Competente. Como evidencia deberá suministrarnos su “Autorización como Gestor de Residuos Peligrosos” donde deberemos comprobar el listado de residuos que está autorizado para gestionar.

En muchas ocasiones el transportista es el propio gestor. En otras esté lo subcontrata. En cualquier caso debemos disponer de su “Autorización como Transportista de Residuos Peligrosos” donde se indica el listado de matrículas autorizadas para transportar. En este caso si el transporte se va a realizar pasando por varias Comunidades Autónomas deberemos disponer de la “Autorización como Transportista” de cada una de las Comunidades Autónomas por donde pase. 

*En la mayor parte de las páginas web de las Comunidades Autónomas podemos encontrar un Listado tanto de Gestores como de Transportistas de Residuos Peligrosos Autorizados.

Documento de aceptación de residuos peligrosos
Una vez firmado el contrato con el Gestor de Residuos, nos debe suministrar un “Documento de Aceptación” por cada uno de los residuos que potencialmente vamos a general.
Este documento debe entregarse a la Organización antes de iniciar cualquier trámite de transporte de los mismos y sirve para justificar que el gestor admite al productor los residuos a gestionar.
El documento de aceptación deberá incluir la fecha de recepción de los residuos y el número de orden de aceptación.

Notificación de Traslado
Cuando se vaya a producir el transporte de residuos peligroso y este transporte sea de una Comunidad Autónoma a otra, el Gestor deberá remitir con antelación a la fecha del envío de los citados residuos una “notificación de traslado” tanto a la Organización como a las autoridades competentes de las Comunidades Autónomas de origen y de la de destino.

Documento de control y seguimiento
El DCS (Documento de Control y Seguimiento) es el documento que se cumplimenta cada vez que se traslada un residuo peligroso. En él se recoge información sobre el productor, gestor y transportista del residuo, tipología y cantidad transportada del residuo, así como todas las incidencias que pudieran ocurrir durante su traslado.
El Gestor cuando procede a la recogida de residuos dejará a la Organización un “documento de Control y Seguimiento”.
Una vez en el destino, el gestor autorizado acepta la transferencia de la titularidad del residuo peligroso, rellenando los datos que le correspondan en el documento de Control y Seguimiento, y enviará los ejemplares que procedan al Organismo competente. 

Libro-Registro de Residuos Peligrosos
La Organización es responsable de mantener al día un “Libro-Registro de Residuos Peligrosos”. En este formato se incluirán todos los documentos anteriormente citados. El artículo 17 del R.D 833/1988 establece concretamente qué datos deben constar en el registro.

Cualquier aclaración o duda que os surja sobre este tema no dudéis en contactar con nosotros.